Compromiso
y entrega en cada tarde de toros es lo que mantiene la actitud triunfadora de
Arturo masías “El Cejas”, matador hidrocálido que se presentó en el coso
taurino de esta ciudad y aunque no triunfo se le noto con mucho oficio y arte. Masías
lidio toros de la ganadería de San Salvador de la familia Conde Medina de Rio
Lagarto Yucatán; “Tronado y Vientecillo” no tenían nada, astados, arados sin transmisión
y más que nada falta de bravura.
Entrevistado
el diestro de Aguascalientes se congratuló por estar en esta ciudad y aunque es
feria anual no dudara en regresar en tanto sea llamado a torear. Ataviado en un
traje de luces de azul celeste y oro hiso un recuento de lo mágico del
toreo, desde niño quiso serlo y trabajo
fuerte para llegar porque no era hijo de torero, mucho menos tenia familia vinculada
a la tauromaquia.
Masías
estuvo un día antes toreando en ciudad Juárez y en su tránsito en esta ciudad
tuvo problemas en la aduana con sus espadas y su mozo no estuvo presente en un
momento muy íntimo de un matador que es vestirse y prepararse para estar en la
plaza de toros portátil de esta ciudad.
Emoción
por estar ante el toro bravo; Pasión y emoción, ingredientes de su arte porque
busca en todo momento que el público disfrute de la faena y hacer que las
pasiones se muevan. Masías fue claro “en la plaza más grande o en la plaza más
pequeña el compromiso y entrega es el mismo, mucho más por estas tierras en que
la gente hace grande sus esfuerzos por pagar su boleto, su entrada y más que
nada hacer la entrega sea la misma”.
El
cejas evoca con nostalgias sus sueños infantiles, agradeciendo a dios la
oportunidad de haber conseguido muchos de ellos, invito a ello de quien tengan sueños
luchen por conseguirlos, no es nada fácil pero bien vale la pena el esfuerzo;
durante la charla decenas de aficionados saludaban al matador de Aguas Calientes
quien no corto ninguna oreja pero su faena fue presenciada con interés de
principio a fin y el público reconoció todo el esfuerzo por agradarles.
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